Lucas 24:1 El primer día de la semana, muy de mañana, vinieron al sepulcro, trayendo las especias aromáticas que habían preparado, y algunas otras mujeres con ellas.
La Biblia cuenta en los evangelios que después de la muerte de nuestro Señor unas mujeres siguieron a José de Arimatea para ver donde seria la tumba donde depositarían su cuerpo. La Biblia también nos dice que el primer día de la semana estas mujeres fueron a la tumba para preparar el cuerpo de Jesús con especias aromáticas, perfumes y aceites. Cuando las mujeres llegaron ahí descubrieron la piedra del sepulcro removida y un ángel les dio las buenas nuevas, ¡Jesús había resucitado!, inmediatamente les fueron dando instrucciones para compartirlas convirtiéndolas de esa manera en las primeras evangelistas.
Este trabajo hubiera podido caer fácilmente en las manos de Pedro, Andrés o Juan, pero Dios eligió a este grupo de mujeres. ¿Por que? Este grupo de mujeres fue valiente, estuvo al pie de la tumba y guiándose por su corazón fueron las primeras en llegar a la tumba después del día de reposo.
La Biblia claramente pone al hombre como cabeza del hogar y de la iglesia, pero a la mujer la ha puesto como el corazón de la iglesia. Así como las primeras evangelistas, Dios sigue usando mujeres hoy en día gracias a la disponibilidad y sensibilidad que tienen hacia el. Los apóstoles pensaban como cabeza, percibidos y sabiendo de los peligros, pero estas mujeres como es característico del corazón no les importo el peligro, fueron en busca de quien amaban.
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